Antes de saber qué es la Identidad Verbal, debes conocer el significado de otro concepto similar: la Identidad Corporativa o Identidad de Marca. La Identidad de una marca es su ser, su esencia, su ADN, lo que la caracteriza y la hace única; es, en términos reposteros, la deliciosa base de galleta sobre la que se sostiene el resto de la tarta 😋
Ahora bien, la Identidad de una marca es mucho (muchísimo) más que sus rasgos visuales, lejos de lo que nos han hecho creer durante años. Y es que para que nuestra marca sepa a gloria en la boca del consumidor, debemos respetar dos ingredientes fundamentales: La Identidad Visual y la Identidad Verbal. No utilizar uno de ellos es como hornear el pastel sin levadura: lo normal es que no crezca y si lo hace va a ser un crecimiento forzoso, gracias a trucos y triquiñuelas, para nada comparable al original.
Llegados a este punto te estarás preguntando con impaciencia…
¿Qué es la Identidad Verbal?
Pues bien, estoy aquí para explicártelo, así que… ¡allá vamos!
La Identidad Verbal es el conjunto de elementos textuales que hacen reconocible una marca. ¿Te esperabas una definición complicada? ¡Te has equivocado! Lo complicado aquí es ponerlo en práctica, pero ¡que no cunda el pánico!, para eso tienes este artículo y la cajita de contacto 😉
Definir la Identidad Verbal de tu empresa te va a ayudar a:
- Construir una marca sólida desde el primer día.
- Conectar mejor con tu audiencia.
- Tener siempre a mano una guía con la que trabajar tu comunicación global.
- Diferenciarte fácilmente de la competencia.
Si estás emprendiendo o has formado ya tu propia empresa estoy segura de que tienes unos colores que te representan, un logo adaptable a diferentes formatos y muy probablemente una página web que respeta ciertos patrones visuales. En definitiva: Te has preocupado por lo que se preocupa todo el mundo cuando se lanza a la digitalización. Con lo cual y por muy dura que pueda resultar la siguiente afirmación: no estás destacando o, al menos, no todo lo que podrías.
¿Sabías que el SEO sin Identidad Verbal no sirve para posicionar?
Utilizar palabras clave, enlaces y subtítulos en las entradas de tu página web está muy bien para subir de puesto en los buscadores; de hecho si no lo haces ¡te animo a que lo hagas! Hacer todo esto y mucho más para quedar primero en la maratón de Google está de maravilla, pero no es suficiente. Para empezar no debes olvidar que tus palabras clave tienen que surgir de tu Identidad Verbal. Si esto no es así difícilmente vas a lograr posicionar el contenido en el nicho de mercado que te interesa. Más allá de esta obviedad, déjame decirte que si no trabajas esta parte de tu identidad, el potencial cliente entrará, se aburrirá y pasará a convertirse en un internauta más. Y no quieres eso, ¿verdad?
¿Por dónde empezar a trabajar la Identidad Verbal?
Ahora que ya sabes qué es la Identidad Verbal y cómo puede mejorar tu negocio y tu vida, ha llegado el momento de profundizar en el tema. Coge las gafas de buceo que ¡empezamos!
No hay identidad Verbal sin manual, las cosas como son. Para poder decir en voz alta que nuestra marca tiene Identidad Verbal, es necesario que tengamos un manual que recoja de forma clara y ordenada todos los elementos que la conforman.
Cada profesional es un mundo en sí mismo y trabaja la Identidad Verbal de una forma diferente. A continuación voy a ponerte los elementos comunes a todos ellos:
- Naming o nombre de marca
- Tagline o slogan principal
- Claims secundarios
- Voz de marca
- Tonos de la marca
- Territorio verbal
Naming
Es simple y llanamente el nombre de tu empresa. Su importancia reside en que es el aspecto más duradero de una marca. Si has leído El nombre del viento o has visto Desayuno con diamantes, sabrás que poner nombre a las cosas, las hace reales y tuyas. Debe estar alineado con la propuesta de valor de tu marca.
Los criterios para desarrollar un buen naming son infinitos y dependen de ti y de tu propósito de marca. Tipos de denominaciones:
- Denominación toponímica: el nombre hace referencia al origen geográfico de la empresa- Banco Santander.
- Denominación descriptiva: decribe la actividad de la empresa: Telepizza.
- Denominación contractiva: nace de una sigla u acrónimo: BBVA.
- Denominación simbólica: se basa en el nombre de un animal u objeto real: Camel.
- Denominación patronímica: basta con elegir tu nombre u apellido: Carbonel
- Denominación sin asociación: nombre inventado que no se relaciona con nada concreto: Kleenex.
Tagline o slogan principal
Frase que acompaña al nombre y al logo y puede utilizarse también en comunicaciones concretas. Hace que tu marca sea memorable y exportada con facilidad si se trata de una marca global. Tiene como objetivo principal resaltar el valor de tu emprendimiento.
Ejemplos:
Desigual: La vida es chula
Nike: Just do it
Chocolates valor: Placer adulto
Claims secundarios
Los claims son slógans asociados a estrategias concretas: La campaña de Navidad, las rebajas de verano, Halloween…
Deben ser acordes a los valores de la marca y capaces de evolucionar a medida que lo hace la empresa y sus servicios.
Voz de marca
Antes de entrar en detalles te lanzo una pregunta: Si fueras una marca, ¿cómo hablarías? Yo hablaría con voz de mujer joven, de forma dulce y tranquila, rozando en ocasiones los susurros. ¡Ahí lo tienes! La voz de tu marca es la manera en la que habla, la forma en que se comunica con los demás. Y va a variar en función de la situación, del momento o del público al que se dirija.
Tono de marca
La voz es estática, el tono por el contrario se adapta a la situación y dependiendo de esta puede ser informativo, testimonial, sensual, amistoso, educado, agresivo… las posibilidades son infinitas y dependen, entre otras muchas cosas, de la situación, el momento, el canal y la persona a la que nos dirijamos.
Territorio verbal
Es probablemente el punto del manual que más relación guarda con el lenguaje. El territorio verbal tiene que ver directamente con el vocabulario que utilizamos y la manera en que lo expresamos. Se trabaja a partir de las jergas profesionales, las expresiones territoriales y las muletillas personales.
Podría pasarme horas hablándote de la Identidad Verbal, pero no quiero aburrirte. Te he dado los pasitos más esenciales para que puedas empezar a hacerte una idea de lo que es, pero recuerda que estos son solo los puntos más esenciales, detrás de cada punto hay infinidad de apartados y trabajo y dentro de un manual profesional muchos más factores importantes que se deben tener en cuenta.
Si has llegado hasta aquí es porque la Identidad te preocupa de verdad.